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Si eres un usuario habitual de la aviación ejecutiva y los taxis aéreos, seguro que se te ha pasado por la cabeza la posibilidad de comprobar al menos el precio de compra de un jet privado.
Al fin y al cabo, eso acabaría con los conflictos de horarios, el compromiso con terceros, la imposibilidad de elegir tu avión preferido, ¿no? Tendrías un avión propio para ir a donde quisieras, cuando quisieras.
Sin duda, este es un pensamiento tentador. Pero, ¿merece la pena – aun teniendo la viabilidad financiera de realizar una operación de este tipo – invertir en la compra de un avión en lugar de seguir optando por el chárter? Para tomar este tipo de decisiones, es necesario saber de antemano cuáles son los costos que implica cada una de estas elecciones.
¿Cuánto Cuesta Alquilar Un Avión?
Todo dependerá de la aeronave elegida, el número de pasajeros, el tipo de pista de despegue y aterrizaje y los destinos de embarque y desembarque. Pero a la hora de calcular el precio se tienen en cuenta los costes de alquiler estimados por hora o kilómetro recorrido; tasas de aterrizaje en aeródromos; el servicio de base fija (FBO) del operador en relación con el handling y uso de la terminal de jets; pernoctaciones, entre otros.
Sobre toda esta cadena de costos, de fijos a variables, los operadores calculan los precios finales a destinar al público, con un ligero margen sobre los gastos de operación. Muchas empresas también establecen una tarifa o distancia mínima para garantizar que el viaje sea viable. En itinerarios más pequeños, esto suele oscilar entre una y dos horas de vuelo.
Otro factor que influye en el valor de alquilar un avión: el coeficiente de vuelo. ¿Qué significa eso? Es un indicador que estima la distancia real recorrida por la aeronave entre el embarque y el desembarque. Cuando calculamos rutas en un mapa, pensamos en líneas rectas, pero en realidad los aviones, ya sea por tráfico aeroportuario, geografía o infraestructura militar, no viajan en itinerarios rectos.
Por lo tanto, el operador puede cobrar hasta alrededor de un 15% más que la cotización en rutas cortas. En viajes más largos, es habitual que las empresas no apliquen el coeficiente u opten por una tarifa simbólica que ronda el 3%.
Teniendo esto en cuenta, un viaje en avión entre São Paulo y Río de Janeiro o Curitiba, con itinerarios cortos, cuesta aproximadamente R$ 27 mil y R$ 33 mil con modelos básicos, con capacidad para 6 o 5 pasajeros, como el Phenom. 100 , el Honda Elite o el Citation CJ1 . Un vuelo entre São Paulo y Tokio a bordo de un avión de largo alcance cuesta desde dos millones de reales y puede llegar hasta el triple en modelos más sofisticados.
¿Cuánto Cuesta Mantener Un Jet?
Disponer de un avión propio, adelantamos, es mucho más complejo que contar con el dinero y las ganas de adquirirlo. No basta con hacer la inversión y “llevarla a casa”. Por lo tanto, es importante comprender cada detalle de los costos de poseer un jet antes de tomar una decisión al respecto.
Al principio debes tomar una decisión: ¿eliges un avión nuevo o un modelo usado? Por la primera opción, es probable que pagues mucho más, pero es posible que tengas menos costos de mantenimiento y actualización a largo plazo. Si eliges un avión usado, la inversión será menor, pero existe el riesgo de mayores costos de mantenimiento y no tener acceso a las últimas tecnologías.
¿Y el precio? Es poco probable que encuentres un avión usado que valga menos de US$ 3 millones. A partir de ahí, los precios pueden llegar a cerca de US$ 70 millones. Al tipo de cambio actual del dólar estadounidense (alrededor de R$ 5,6), es sin duda una gran inversión. El modo más común de adquisición de aeronaves en la actualidad es mediante leasing.
Es un tipo de alquiler en el que puedes arrendar la aeronave por un período determinado con una empresa, pagando cuotas mensuales, además de un pago inicial. En función del acuerdo que se celebre, al término de este contrato, la aeronave (a) tiene su arrendamiento renovado, (b) es devuelta al arrendador o (c) es definitivamente adquirida por el usuario a su valor de mercado.
Pero si aceptaste invertir en tu jet y ya cuentas con el mantenimiento de la aeronave, ¿qué otros gastos debes calcular? El primero es el hangarage, es decir, la estancia del bien en un hangar. Un valor que puede variar mucho según la región de servicio.
Además, es necesario invertir en combustible, tarifas de aterrizaje, salario y capacitación de la tripulación, seguros, sistemas de información de aviónica (comprados por suscripción), bases de datos de navegación y terreno, cartas, mapas, en el sistema de comunicación de la aeronave y, no menos importante, licencias. Una operación de muchos pasos y detalles.
Es difícil estimar exactamente los costos de mantenimiento debido a las numerosas variables, pero la estimación es que, al menos, un avión parado requiere R$ 70.000 por mes. Las aeronaves de mediano tamaño pueden alcanzar una inversión mensual de R$ 200.000. Cuanto más usado, complejo y sofisticado sea el avión, mayor será su valor.
¿Cuánto Vale Realmente?
Ahora que conoces todos los detalles financieros sobre el alquiler o la compra de un avión, es hora de poner cada gasto en la punta del bolígrafo y calcular lo que vale la pena para ti.
En términos de comodidad, tener tu propio avión es una forma de asegurarte de que siempre puedes viajar cuando tú elijas. Todo se puede personalizar a tu gusto y todos los detalles de la operación estarán bajo tu supervisión.
Por otro lado, en cuanto a la practicidad, el chárter te garantiza que no tendrás dolores de cabeza a la hora de planificar tu viaje. Solo indica los lugares, horarios y pasajeros y deja todo en manos de personas especializadas.
En términos de costo, esta relación se vuelve más compleja. Para alguien que viaja mucho, invertir en un jet realmente puede tener sentido. Hay quienes estiman que el uso ideal, para que valga la pena, debería ser entre 200 y 400 horas de vuelo al año. Menos de este rango, lo más probable es que sea preferible mantener el chárter.
Pero no hay un cálculo mágico o una respuesta correcta. Todo dependerá de tu realidad, demanda y valor de la aeronave alquilada/adquirida. Lo importante es tener en cuenta todos los detalles aquí expuestos a la hora de tomar la decisión.
Hay opciones intermedias como la propiedad compartida de aeronaves. En este sistema, cada interesado adquiere una parte de un avión, siendo parcialmente propietario del bien. Toda la operación es realizada por un administrador. Sin embargo, existen riesgos de conflictos de programación. Otra opción: comprar un jet y externalizar su administración, lo que seguramente encarecerá aún más el proceso, pero te ahorrará tiempo. En este modelo, incluso es posible alquilar tu avión, cuando no quieras utilizarlo, como una forma de reducir la inversión.
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